Dimargo en otra versión.

Rondando por la universidad APEC, alta casa de estudios, sin fines de lucro (no entiendo porque), me encuentro con este señor cabizbajo, con la moral baja, un yeso en un brazo y ayudándose con un bastón, en un puesto de hot dog, saco mi celular y comienzo a fotografiar pasando desapercibido, al que alguna vez hubo que hacer citas, esperar más de dos horas para verlo en sus oficinas lujosas, me detengo a mirar y pienso que como cambia la vida, es verdad aquella frase que dice "todo lo que sube, baja", quien iba a imaginar que el señor Diogenes Marino Gómez (Dimargo), fuera hoy un mendigo, un señor que tenía tando dinero como los ingresos que genera el canal de panamá.

Según me enteré el yeso lo tiene fruto de una trifulca con miembros de la Policia Nacional mientras reclamaba sus derechos sobre el Hostal Nicolás de Ovando, de la Zona Colonial, sobre el cual la Suprema Corte de Justicia, ordenó que se le devolviera. Pero imaginense ustedes estamos en República Dominicana. Esa sentencia nunca se ha cumplido por más que Dimargo ha luchado.

Aquí les dejo las fotos del señor Dimargo ahora en otra versión...