Inconsciencia

Ayer me monto en mi carro público, como todos los santos días, a esperar que se llene para arrancar, cuando vamos en el camino conté 6 semáforos en los cuales se había ido en rojo el chofer, desde el teatro nacional hasta llegar a la avenida México con Duarte. Pero eso no es nada, al finalizar la parada, un agente de AMET manda a detener al carro. Yo creía que el chofer se iba a parar de lo más normal, pero no, en vez de hacer eso, le iba a tirar el carro encima al agente y aceleró el carro con todos nosotros ahí adentro. Dos esquinas más adelante, nos deja, diciendo que él no tiene ninguno de los reglamentos para conchar, licencia de conducir, tablilla de la ruta, nada, pero cojí el carro en una parada que es una ruta.

Imagínense ustedes el problema que hubiera sido para ese chofer si hubiera chocado a ese AMET, solamente por evadir una multa, también poner a 6 personas en peligro porque si ese agente de la AMET hubiera tomado represalias y dispara hacía el vehículo hubiera sido un hecho lamentable. Esas son cosas de las inconsciencias que tenemos en nuestro país de las personas que brindan un servicio tan importante a la población. Esa falta de conciencia y educación se ve en una gran parte de la población y es una de las razones principales de el camino que ha tomado Dominicana.