viernes, 15 de junio de 2007

Contrastes de Vida

Esta madrugada a eso de las 3: 30 de la mañana me levanta mi padrastro para que lo acompañara al aeropuerto pues un hijo de él llegaba de los nuevayores. Oigame a esa hora no hay nadie en la calle, las calles son tenebrosas, parecen sacadas de una pelicula de terror. Ninguna patrulla de policía en la carretera desde Santo Domingo hasta el aeropuerto, ningún poste de luz funcionaba. Por lo visto los ladrones han hecho su agosto por ahí, con los cables, por lo que ninguna luz funciona desde Santo Domingo hasta el aeropuerto. Pasando el peaje veo que hay un solo guardía de seguridad, en un sitio donde se mueve tanto dinero. Por lo visto los dueños de los negocios se la ponen fácil a los ladrones.

Por fin llegamos al aeropuerto y aparece de todo, siempre viene un moreno con trenzas y muchisimos binblines, aparece una jeva con los cabellos rojos combinadas con unos zapatos del mismo color, aparece el melodrama de los años sin ver a un familiar, los llantos, en fin, un aeropuerto es una amalgama de sentimientos distintos. Cojemos las maletas y arrancamos para la ciudad. En el camino le pregunta el hijo al don:

- Y qué ?, como está la ciudad papi ?, Como está el país ?

- Bueno mi hijo, la delincuencia está azotando el país, será mejor que te quites esa cadena y ese guillo que trajiste, esa camara ten cuidado con ella.

A seguidas comenzó él a analizar punto por punto nuestras grandes diferencias con nuestros amigos del norte del continente.

- Esas son las cosas que me desilusionan de este país, por lo menos eso debería tener el ciudadano, seguridad. Mira en NY salgo yo a esta hora con todo esto y quien se atreve a ponerme la mano. Para acá vuelvo yo nada más amarrado, la vaina allá está mala pero aquí no hay vaina ni siquiera.

- Papi el otro día vi el carrito que yo tenía aquí y me dio una melancolia, el que se me quedaba en cada esquina, en cada semáforo. Aquí yo nunca iba a tener un carro como el que tengo ahora allá, quizás lo hubiera podido tener pero a que edad. Hace un mes me compré un BMW 07, lo debo casi entero pero por lo menos puedo tenerlo.

- Pero nada mi país es mi país, papi quiero que me consigas un aguacate para bajarmelo con la comida, y en la noche me lleves a una fritura para comprar aunque sea mil pesos de fritura, que tengo un deseo de esa vainaaaaaaa!!!!

Pensando yo, estas personas vienen para acá a comer fritura, aguacate, yaniqueques y a pasear para los resorts. Y nosotros aquí con todas esas vainas y halando más aire que una goma. Que contrastes de la vida.

1 comentario:

Kate dijo...

-la vaina allá está mala pero aquí no hay vaina ni siquiera.-

JAJAJAJAJAJA... eso si es verdad!